– El ritmo destructivo del rock

Rock, o rocanrol en español, es un término amplio que agrupa varios géneros de música popular. Su forma original, el “rock ’n’roll”, surgió como una combinación del blues y la música country, para luego incorporar algo del jazz y hasta de música clásica; se ha centrado en la guitarra eléctrica, habitualmente como parte de un grupo de rocanrol con cantante, bajo, batería y algunas veces órgano o piano. Está centrado en las canciones con compás de 4/4.

A finales de los años 50 surgieron varios subgéneros que luego contribuyeron al desarrollo del rock psicodélico (del que después surgieron el heavy metal y otras formas). El rock, heredero de la tradición de protesta, el enojo y la desesperación, ha sido asociado con el activismo político, el racismo, el sexo y el uso de drogas. Usualmente se considera una expresión de rebelión de la juventud contra el consumismo y el conformismo. Se distinguen especialmente el rock pesado, que gira en torno al suicidio, el satanismo, la muerte y la guerra nuclear; el rock político, que promueve un gobierno mundial y transfiere la responsabilidad de la guerra y la pobreza del mundo a Estados Unidos (no hay rock político que hable en contra de los soviéticos); y el tecno-rock, con sus canciones abiertamente sexuales.

Normalmente, en la música en general se acentúan los compases impares: el primero y un poco menos el tercero (en el de 4: UNO-dos-TRES-cuatro… en la música más común; o UNO-dos-UNO-dos… en la marcha). El vals es de tres tiempos: UNO-dos-tres, UNO-dos-tres…

Pero el rock usa generalmente la forma sincopada o fuera de ritmo: uno-DOS-tres-CUATRO… La forma sincopada es una estrategia compositiva para romper la regularidad del ritmo acentuando una nota en un lugar débil o semifuerte de un compás. Es, por lo tanto, un ritmo antinatural, contaminado, caótico. Es un asalto a los sentidos (con excitación sexual). De hecho, el “rock ’n’roll” y el “jazz” constituyeron eufemismos del acto sexual (el ritmo es sugestivo del “empujón” pélvico).

El rock y sus variantes como rebelión de la juventud también dieron expresión a la liberación erótica, contraria al autocontrol en el uso razonable de la facultad reproductiva, por lo que han sido un factor determinante en la hipersexualidad de la cultura popular de hoy.

Entre las múltiples clases de rock están: el jazz rock, el blues rock, pop rock, punk rock, noise rock, country rock, hard rock, rock psicodélico, rock ácido, rock cristiano; y últimamente: rap, hip-hop y tecno (tensiones) que se enfocan más en el insistente ritmo infernal, una repetición sensual que rebaja al ser humano a un nivel inferior al de las bestias. (El rock pesado es el abuso del Poder Divino. El rock político es el abuso de la Sabiduría Divina. El tecno rock es el abuso del Amor Divino.)

El rock, como todo lo malo sobre la Tierra, es obra de los ángeles caídos, los que siguieron a Lucifer en la Gran Rebelión y cuya conciencia “cayó” a bajos niveles de vibración cuando fueron arrojados a la Tierra por el arcángel Miguel para evolucionar en densos cuerpos físicos. Y aquí han caminado y buscado almas, mentes y cuerpos que puedan devorar, sembrando semillas de inquietud y rebelión luciferina entre la gente a través de las subculturas del rock, las drogas, el alcohol, la nicotina, la magia negra, la brujería, el satanismo, la manipulación de los medios de comunicación y su culto a la muerte y a la idolatría.

Una muestra de la conexión del rock y el satanismo es el gesto de las manos de la iglesia satánica (el pulgar sosteniendo los dos dedos centrales contra la palma con el índice y el meñique levantados). Este gesto satánico es imitado por muchos grupos de heavy metal (como Slayer y Venom, que son discípulos del satanismo), así como por muchos que los escuchan. Posiblemente muchos adolescentes no sepan lo que significa ni que tiene que ver con el satanismo, pero las películas satánicas, los crímenes satánicos y el rock satánico salieron, como dijo Anton LaVey, fundador de la Iglesia Satánica, del satanismo.

Ellos no sólo forman parte de la Muerte y el Infierno, también forman una parte directa de la Conspiración Capitalista Comunista Internacional. Sin rock el comunismo no habría entrado en América. Y sin el capitalismo, ni el rock ni el comunismo hubieran tenido el apoyo tecnológico para volar. Mientras que los Hijos de Dios y su sendero de iniciativa individual son “de arriba”, como dijo Jesús, el rock, el comunismo y el capitalismo pervertido (desde el asesinato de Lincoln) son “de abajo”, salidos del pozo sin fondo, por eso se refuerzan mutuamente. Son miembros del mismo equipo.

Estos ángeles caídos no han venido para cambiar su camino y doblar la rodilla o confesar al Cristo vivo; ellos juraron enemistad a Dios y han venido a destruir esta civilización (y por ellos ocurren los cataclismos). Los músicos de rock son voceros de la semilla del Malvado y usan su música y su ritmo sincopado para pasar la culpa de todos los crímenes de los ángeles caídos a los Portadores de Luz. Hablan de muerte (pero están en contra de la pena de muerte* que ellos merecen).

 

* La pena de muerte es un castigo para el alma.

 

¡No hay más religión que el satanismo en la diversión con el rock! No hay moral en el comunismo mundial ni en su contraparte en las sociedades capitalistas con el libidinoso uso incorrecto del fuego sagrado del hombre y de la mujer. ¡No son pilares de Dios sino la fortaleza de las hordas satánicas!

El materialismo moderno ha hecho que la gente caiga en la trampa de considerar la música como algo sin importancia, sin darse cuenta de que esa basura musical está controlando a la juventud y descontrolando a la familia y a la sociedad.

En cambio, por el lado positivo, la buena música (clásica y de los antiguos celtas, danzas folklóricas, canciones con sentido, melodías armoniosas) es el eco gozoso de la vida en movimiento. En otros tiempos, grandes compositores (Bach, Brahms, Grieg, Wagner…) percibieron el ritmo gentil y armónico de la naturaleza y lo estamparon en la belleza de sus obras. Por su parte, el ritmo de ¾ del vals es el más cercano al ritmo de los latidos del corazón, creando una sensación de armonía en quienes lo escuchan o lo bailan.

Los niños reconocen y aman la buena música; ellos vienen de las mismas elevadas regiones espirituales en donde se inspiraron los grandes para darnos sus geniales obras musicales. Beethoven, que ya estaba sordo cuando escribía la obra cumbre de la música clásica, dijo: “Yo no escribo música ruidosa.” Y en sus nueve sinfonías, que no sólo tienen el poder de neutralizar el ritmo sincopado del rock que se toca en todo el planeta, trazó los pasos para que la persona despierte y se eleve por encima de su discordante personalidad hacia un nivel de autodominio.

La música es como la dieta. Hay combinaciones de sonidos que nutren y fortalecen el alma en tanto que otros (como la comida chatarra) son dañinos. El efecto de la música es acumulativo e involucra la vida o la muerte de las células y en último término del alma. A cada momento, y de acuerdo con la clase de música que se escucha, aumenta o disminuye el vigor físico, la estabilidad emocional, la agilidad mental y la espiritualidad personal.

 

Dr. Sigrida Robert

Qué dicen los maestros ascendidos sobre el rock

Drogas, alcohol, nicotina, azúcar y rock son los cinco “villanos”, todos son destructivos porque impiden el desarrollo de los cinco sentidos espirituales del alma; más todavía, han puesto el camino para el amplio aumento en el acto final de la autodestrucción: el suicidio.

Elizabeth Clare Prophet, PoW vol. 32 # 27

La presencia de azúcar, alcohol, nicotina, drogas… es un debilitamiento de las fibras mismas del cuerpo espiritual mediante la cuales ese cuerpo puede contener luz; todo ello agravado por el ritmo del rock y el rock ácido proyectados sobre los jóvenes. Y amados míos, los representantes del Espíritu Santo se preguntan hoy si esta generación no se perderá debido a la rebelión en contra del amor en el uso inadecuado del ritmo en ese sonido pervertido que está invadiendo todos los hogares donde hay gente joven.  Y esto ocurre entre los jóvenes debido a las energías del fuego sagrado. Estas energías son las que los caídos desean.

Amados míos, no hay nada, y digo nada en absoluto que sea constructivo en ninguna forma de jazz.

Shiva, PoW vol. 21 # 37

Os doy la siguiente información: el satanismo va en aumento en este siglo en este país y en todo el mundo. Hay vudú dentro de la iglesia católica en América del Sur y en cualquier lugar. Hay una detestable proyección de absoluta perversidad de la Oscuridad sobre los niños pequeños a través de las caricaturas de los sábados en la mañana. Hay satanismo en el rock. Hay satanismo en la industria cinematográfica.

Hilarión, PoW vol. 38 # 7

Lo más profundo del infierno ha entrado en la sociedad en todos los niveles a través del mal uso de los sistemas de sonido, la electrónica y la tecnología.

Surya, PoW vol. 30 # 33

…esas energías que son la más diabólica perversión del amor: el mal uso del ritmo en el rock y el rock ácido, con lo que hay una profanación de la luz y el esclavizamiento de las almas por espíritus impuros que entran a través de los sentidos.

Venus, PoW vol. 21 # 35

Benditos corazones, sólo autodestrucción y desintegración pueden venir con el ritmo sincopado de la música rock.

Himalaya, PoW vol. 30 # 37

¡No hay otra religión que la de Satanás en la participación de las drogas! ¡No hay otra religión que el satanismo en la diversión con la música rock! No hay moral en el comunismo mundial ni en su contraparte en las sociedades capitalistas del libidinoso uso incorrecto del fuego sagrado de la mujer y del hombre… ¡No son pilares de Dios sino la fortaleza de las hordas satánicas!

Godfre,  PoW vol. 25 # 18

El mal uso de la palabra sagrada final y definitivo es a través del rock, las drogas, el alcohol, la nicotina, la magia negra, la brujería, el satanismo, el culto a la muerte, la mentira y el crimen. Y el mal uso final de la palabra sagrada regresa como cataclismos.

Elizabeth Clare Prophet, PoW vol. 33 # 7

Amados míos, no es cuestión de negar la música rock y el rap. Es cuestión de arrojarlos. Yo os digo que escuchar rock, rap y cualquier otra clase de disonancia salida del infierno es una adicción, una muy profunda adicción.

Maitreya, PoW vol. 35 # 42

Como el sonido es el medio mismo de la creación, debe reflejar el sonido celestial y no los ruidos de la Muerte y el Infierno. Por lo tanto, ¡que el rock y sus ritmos y todas las formas de perversión de la música sean removidos de las iglesias! No tienen el diseño que puede sostener la Luz del Cristo vivo.

Hilarión, PoW vol. 34 # 21

Los jóvenes son las víctimas inocentes del más grande embate de la manipulación de las neuronas a través del rock, la cultura de las drogas, el uso incorrecto del sexo. Y con la manipulación de la cadena del DNA los ángeles caídos han deteriorado a las generaciones que en un no lejano futuro nacerán sin las neuronas que son necesarias para el contacto de los chakras y el alma. Han planeado una raza de robots.

Maitreya, PoW vol. 43 # 33

Muchos son retenidos por las drogas… otros, amados míos, por el rock y el satanismo o psiquismo o brujería o magia negra. Amados míos, la realidad entre la Luz Absoluta y la Oscuridad Absoluta es el filo de la navaja.

El Morya, PoW vol. 32 # 33

El rock es el pórtico de la Muerte y el Infierno al que los gaiteros, atlantes reencarnados, han llevado a la gente. Incluso los pastores en sus púlpitos han dado su beneplácito al rock cristiano en nombre de Jesucristo. ¡Me avergüenzo de ellos!

Elizabeth Clare Prophet, PoW vol. 32 # 27

Ustedes han permitido [a los falsos pastores] traer al templo de mi Padre su rock, sus drogas, la perversión de uso del fuego sagrado y su consorcio con los demonios en nombre del Espíritu Santo.

Jesucristo, PoW vol. 23 # 3

El mal uso del sonido es peligroso y ha sido usado por las fuerzas de la Oscuridad para desencadenar cataclismos… la música rock quema, consumiendo la sensibilidad del alma, neutralizando la acción de los chakras y la habilidad del alma para hacer contacto con Dios… La música de las esferas es la música del Cuerpo Causal de todo hijo e hija de Dios. Es música que purifica y cura, que equilibra y restaura la integridad desplazando la insensatez causada por el ritmo sincopado del rock.

Omri Tas, PoW vol. 35 # 64

El fuego sagrado ha sido distorsionado a través del uso incorrecto del sexo, y la música sagrada ha sido abortada a través de la introducción de los ritmos astrales y el vudú. La nueva moral de la gente debe ser vista por lo que es: simplemente las viejas y sórdidas costumbres de Sodoma y Gomorra que han regresado. A los niños y a los jóvenes se les enseña a rendir homenaje a las personalidades, así que ellos siguen a los ídolos del rock ’n’-roll, quienes a su vez son víctimas de los demonios de la oscuridad. Los brutales sonidos de estos gaiteros chocan contra las finas sensibilidades del alma y destruyen la maquinaria electrónica interior, que permitiría a la juventud estar en sintonía con el Espíritu de Dios y descifrar las lenguas de los ángeles.

La apuesta ahora es atraer a los jóvenes hacia una especie de rebelión antes de que tengan la oportunidad de desarrollar el correcto entendimiento de la vida y de su destino como herederos de Dios. Pero, honestamente, yo no puedo decir que sus mayores han sobresalido en virtud, ni encuentro que el poder del ejemplo haya sido esparcido en el mundo como debería ser.

Por lo tanto, estoy avisando a todo el mundo que eviten el mal y la oscuridad que penetran el campo de fuerza de los cuatro cuerpos inferiores cuando se pone atención al sonido discordante del jazz moderno. Aconsejo a todo el que verdaderamente quiera ser alquimista del Espíritu buscar la música clásica de los grandes compositores: Beethoven, Bach, Chopin, Haydn, Haendel, Wagner, Liszt, Mozart, Mendelsshon, Mahler y muchos otros que han sido comisionados por la Hermandad [Blanca] para producir la música de las esferas.

Saint Germain, On alchemy

© Summit University Press

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